Ningún ídolo u amuleto, sin importar la forma y el material de estos, podrá evitar el juicio final y la justa sentencia, el juicio no es bueno para todos ni es malo para todos, es obvio que las fuerzas oscuras, las fuerzas de la falsedad, como la falsa inteligencia, demonizen el juicio, a los santos ellos llaman demonios, ¿Qué otra cosa se puede esperar de los que se saben perdedores?.

El juicio final, la ficción: Se salvarán los condenados gracias a sus ídolos y a sus dioses. La realidad: No se salvará ni el dios y abogado de los criminales, menos se podrán salvar los criminales. 28.9.2024 El Heraldo y la Sentenciadora: Crónicas de un Pueblo Olvidado El Heraldo llegó al pueblo una fría mañana, cuando … Continue reading Ningún ídolo u amuleto, sin importar la forma y el material de estos, podrá evitar el juicio final y la justa sentencia, el juicio no es bueno para todos ni es malo para todos, es obvio que las fuerzas oscuras, las fuerzas de la falsedad, como la falsa inteligencia, demonizen el juicio, a los santos ellos llaman demonios, ¿Qué otra cosa se puede esperar de los que se saben perdedores?.